El mundo se está enfrentando a un problema que nos impacta a todos: cambio climático. Sus consecuencias nos están alcanzando a pasos agigantados. Por ejemplo, fenómenos atmosféricos más destructivos y afectaciones en la siembra de productos. Un cambio en la forma de pensar y actuar del ser humano es necesario. Es por esto que cada día se habla más de sustentabilidad y alternativas “verdes”. Tal vez pienses que esto se enfoque a las grandes empresas e industria. Sin embargo, debes saber que incluso se puede ser verde al pensar en inversión.
Los llamados “bonos verdes” son un instrumento de deuda que reúne capital para utilizarse específicamente en proyectos enfocados al medio ambiente. La idea es que los recursos generados se usen para fondear proyectos sustentables y en pro del planeta. Dentro de este concepto se encuentran planes de:
Los bonos verdes son una opción de bajo riesgo para el inversionista en el sentido de que no se enfrentan al riesgo subyacente del proyecto que se está fondeando. Es decir, en caso de que haya pérdidas, los inversionistas no se ven afectados. Y, si hay ganancias, el bono se repaga junto a los beneficios del proyecto.
Un principio básico de este instrumento es la credibilidad de la institución o empresa que los emite. Esto implica seguir criterios de transparencia y calidad definidos por los “Principios de Bonos Verdes”.
Estos criterios se amparan en cuatro pilares fundamentales:
Si te interesa comenzar a invertir y recibir un mejor rendimiento que en otros instrumentos financieros, contáctanos. En WORTEV CAPITAL te ofrecemos 24 % de rendimiento ANUAL sobre tu inversión. ¡Conócenos!